Padecimientos de espalda

Una hernia de disco se produce cuando el disco intervertebral se degenera y el núcleo interno se proyecta hacia afuera. Esto ejerce presión directamente sobre la raíz de los nervios raquídeos, que a su vez puede dar lugar a fuertes molestias en cualquier zona de la espalda, e incluso en brazos y piernas.

Los discos intervertebrales son los tejidos situados entre cada vertebra en la columna vertebral y permiten la articulación entre ellas. Estos discos se componen de un núcleo pulposo compuesto por una sustancia gelatinosa que contiene un gran porcentaje de agua al ser altamente hidrófila. 

Químicamente está formada por una sustancia fundamental a base de mucopolisacáridos, sulfato de condroitina mezclado con proteínas, ácido hialurónico y keratosulfato. En el interior del núcleo no hay vasos ni nervios. El núcleo pulposo está rodeado por el anillo fibroso, que está constituido por una sucesión de capas fibrosas concéntricas. Cada capa tiene dispuestas sus fibras en una dirección diferente y siempre oblicuas.

El disco intervertebral crea una articulación entre cada uno de los huesos de la columna vertebral que les permite moverse. Cuando el anillo fibroso que rodea un disco se desgarra, el centro blando puede sobresalir por la abertura, creando una hernia de disco.

La hernia discal se produce cuando el núcleo pulposo del disco intervertebral se desplaza hacia la raíz nerviosa, la presiona y produce daño neurológicos.

Alrededor del 1,10 % de la población posee una discapacidad crónica asociada a una o varias hernias. Son frecuentes en personas con problemas genéticos que afectan al tejido conectivo.

Existen cuatro tipos o grados de hernias:

Protrusión discal: consiste en la deformación del anillo fibroso por el impacto del núcleo pulposo contra este; se produce hacia la parte más debilitada del anillo fibroso, generalmente en dirección posterior o posterolateral.

Prolapso: es la ruptura del núcleo pulposo a través del anillo fibroso, pero sin atravesar el ligamento longitudinal anterior o posterior.

Extrusión: el núcleo pulposo atraviesa el anillo fibroso y el ligamento longitudinal, generalmente el posterior.

Secuestro: es la ruptura del segmento extruido, ocasionalmente con desplazamiento del fragmento libre al canal espinal.

Causas de las hernias de disco

La causa principal de la hernia discal es un sobreesfuerzo, con más o menos carga. Los movimientos repetitivos con cargas más o menos grandes en los que la espalda sufra. La flexión o extensión repetida o brusca de la columna también puede afectar a los discos intervertebrales.

La obesidad o el embarazo pueden ser una causa asociada al aumento de peso corporal que origina sobrecargas en la parte baja de la espalda que desencadena desviaciones de la columna y una presión mayor sobre los discos intervertebrales.

Un de las causas más comunes es el envejecimiento. A medida que envejecemos, los discos de la columna vertebral pueden perder su flexibilidad y elasticidad. Los ligamentos que rodean los discos se vuelven quebradizos y se desgarran más fácilmente.

Las hernias de disco, MTCh y acupuntura no sanitaria.

En la MTCh la degeneración de los discos intervertebrales se asocia a una deficiencia de Riñón.

Por lo tanto, el procedimiento no solo consistirá en abordar las manifestaciones, sino de que además emplearán algunos puntos para fortalecer la energía de los riñones. La acupuntura puede ayudar con la devolución del disco o hernia a su lugar con mayor rapidez, y puede ayudar a frenar el proceso degenerativo.

La acupuntura y la electroacupuntura aliviar el molestias de espalda baja, debido a las hernias de disco.

Alimentación y hernias de disco

Podemos realizar algunos cambios en la alimentación para ayudar a reducir la manifestaciones de las hernias de disco.

Debemos incluir en nuestra dieta alimentos libres de sustancias dañinas, alimentos biológicos y mantener el cuerpo hidratado bebiendo agua mineral.

  • Leches vegetales
  • Cereales integrales
  • Algas marinas
  • legumbres
  • Pescados mejor que carne
  • Frutas
  • Verduras
  • Frutos secos crudos pelados

Debemos evitar los siguientes alimentos inflamatorios y acidificantes.

  • Carnes rojas
  • Azúcar
  • Trigo
  • Maíz
  • Patatas
  • Soja
  • Frutos secos fritos, salados y tostados
  • Frutas tropicales
  • Miel

Todos los alimentos que contengan productos químicos, conservantes y colorantes

  • Gluten
  • Sal de mesa
  • Lácteos
  • Harinas blancas
  • Comida basura

El jengibre es un buen aliado natural para que reducen las molestias producidos por las hernias de forma natural.

El jengibre podemos consumirlo dentro de nuestra alimentación y también lo podemos aplicar a la zona en forma de puré como si fuera una compresa.

A qué esperas

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