Cuando alguien viene a mi consulta una de las primeras cosas que le pido es que me enseñe la lengua. ¿Por qué? Pues por qué utilizamos la lengua como un microsistema para ver el estado físico y emocional de la persona.

En lo que nos fijamos es en la forma, el color, el tamaño, la capa de saburra y la distribución, si hay grietas o marcas dentales y el movimiento de la lengua. Con todo ello nos hacemos una idea del estado general de la persona y del estado particular de cada órgano.

Forma y tamaño de la lengua

La forma y el tamaño de la lengua tienden nos indican el estado de los líquidos en el cuerpo. Por ejemplo, una lengua muy grande, hinchada o festoneada sugiere que los fluidos no se metabolizan adecuadamente en el cuerpo.

En contraste, una lengua muy pequeña y corta puede indicar sequedad, una deficiencia de líquidos o una deficiencia en general.

Además de la forma y el tamaño, cualquier movimiento de la lengua puede indicar una deficiencia de energía o la presencia de un patógeno del viento interno.

Color de la lengua

El color de la lengua varía mucho de una persona a otra, pero es un buen indicador de la naturaleza general de lo que sucede en el cuerpo.

Una lengua roja indica que hay calor presente en el cuerpo, y cuanto más roja está, mayor es la cantidad de calor presente.

Una lengua pálida indica una deficiencia de qi y sangre o la presencia de frío.

Una lengua púrpura le dice a su practicante que hay un estancamiento en alguna parte del cuerpo.

El color de la lengua también puede variar en diferentes partes de la lengua. Por ejemplo, una lengua que está roja en la punta indica calor en el corazón, ya que la lengua se correlaciona con las condiciones del corazón. Justo detrás de la punta corresponde a los pulmones; los lados de la lengua están asociados con el hígado; el centro de la lengua con el bazo / estómago o la digestión y la parte posterior de la lengua está asociada con la condición del riñón.

Capa de la lengua

Un recubrimiento en la lengua también nos da información sobre su salud.

El grosor de un recubrimiento es un indicador de la gravedad de la condición que se está tratando.

Un recubrimiento delgado, uno en el que puede ver la lengua a través del recubrimiento, indica que cualquier patógeno presente es leve o en el exterior.

Una capa gruesa que oculta la lengua le dice a su médico que la afección es más profunda y más grave.

La saburra también nos indica el estado de los fluidos en el cuerpo. Un recubrimiento húmedo o mojado indica un metabolismo de fluidos deficiente, y un recubrimiento seco indica fluidos agotados.

Un recubrimiento que se despega, ya sea total o parcialmente, indica algún tipo de calor o daño al estómago, posiblemente un agotamiento del Yin del estómago o daño al Qi del estómago.

Los recubrimientos de la lengua también varían en color. En general, un recubrimiento blanco delgado es normal, pero también puede aparecer en enfermedades asociadas con condiciones de frío. Un abrigo amarillo o marrón indica calor, y un abrigo gris o negro indica una condición extrema. También es importante tener en cuenta que los alimentos como el vino tinto, el jugo de naranja y el café pueden alterar la apariencia del recubrimiento.

No hace falta decir que los colorantes alimentarios pueden alterar dramáticamente el color de la lengua. Por eso es importante informar se si ha tomado alguno hace poco tiempo

La condición de su lengua cambiará a medida que cambie su salud, pero en general esos cambios aparecen lentamente en la lengua. Una excepción es durante un resfriado o gripe cuando el paciente tiene fiebre alta, una lengua muy roja aparecerá con bastante rapidez.

Ahora mírate la lengua en un espejo y comprueba como te encuentras…

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