Hace unos días escuché una curiosa historia (un tanto graciosa) que tiene como protagonistas al Presidente de EE.UU. Barack Obama y a su esposa, la Primera Dama Michelle Obama.

En la asistencia a un cierto evento, un señor se acercó a saludar a la Primera Dama. Parece ser que este señor, capitán de meseros, fue novio de la Señora de Obama en tiempos universitarios. Barack, en tono humorístico, tras ser informado por ella le susurró: “Así que de haberte casado con él, hubieras sido la esposa de un Capitán de meseros”. A esto, muy espontáneamente, con una mueca en la boca, Michelle le respondió: “No es como piensas Barack… de haberme casado con el capitán, él hubiera sido el presidente de los EE.UU.”.

Tanto si se trata de una historia real o no, se podría tratar de un ejemplo especialmente gráfico para asistir al propósito de este artículo. Permítanme entonces hablarles de nuestro Gran ministro, Mr. Hígado del Cuerpo y la Primera Dama, la Vesícula Biliar del Cuerpo.

La medicina moderna no ha alcanzado a considerar el trascendente papel energético detrás de la vesícula

Si hacemos referencia a la medicina china, la cual alude a cinco órganos principales con sus respectivas cinco vísceras como parejas, este gran Señor ministro Hígado, con su respectiva pareja Vesícula, estarían representando los poderes del cuerpo.

Sobre la vinculación del hígado con el Poder existen numerosos fundamentos para certificarlo, pero dado el caso de este artículo, demos el papel protagonista a la Poderosa Señora Dama Vesícula.

La salud de todas las articulaciones, médula y la tranquilidad del Hígado y Corazón también recaen en la Vesícula

Es bien sabido que cuando el sistema hígado-biliar da problemas, los síntomas agudos son manifestados en la Vesícula. La medicina moderna no ha alcanzado a considerar el trascendente papel energético -invisible para los ojos- detrás de la vesícula, y por tanto -como ya sabemos- ha sido poco valorada y un tanto discriminada.

La mejora en síntomas del cuerpo como vértigos, zumbidos de oídos, jaquecas, problemas musculares y articulares e hipertensión, entre otros, pasan por mejorar el ambiente energético de la Vesícula. (Tom Wang/Shutterstock)La mejora en síntomas del cuerpo como vértigos, zumbidos de oídos, jaquecas, problemas musculares y articulares e hipertensión, entre otros, pasan por mejorar el ambiente energético de la Vesícula. (Tom Wang/Shutterstock)

No es así para la antigua medicina china. Las funciones de la Vesícula en el cuerpo son simplemente enormes.

Las funciones metabólicas a cargo del Hígado ciertamente son innumerables, como certifica la ciencia médica, sin embargo quien energéticamente sustenta el poder de decisión no es otra que la Vesícula Biliar.

Al mismo tiempo, la responsabilidad en la salud de todas las articulaciones, médula y la tranquilidad del Hígado y Corazón también recaerían mayormente en ella, según la antigua ciencia china.

La mejora en síntomas del cuerpo como vértigos, zumbidos de oídos, jaquecas, problemas musculares y articulares e hipertensión, entre otros, pasan por mejorar el ambiente energético de la Vesícula.

Ahora el comentario siguiente, ya sabemos cual es: “Por mal camino vamos pues ya no tengo Vesícula, me la quitaron”. ¡¿Cómo salimos de esto?!

¡Menos mal! Por suerte conservamos las estructuras energéticas. El regreso de este desarrollo científico nos ofrecerá paulatinamente alternativas para suplir estas carencias en el futuro. Por el momento consideremos al menos una posibilidad de que esto pueda suceder.

La medicina china antigua observaba al cuerpo humano desde la óptica de su nivel de energía. Los antiguos médicos chinos han podido observar el mapa de canales de energía o “Jing-Lo”. (Foto: 4X-image/Getty Images)La medicina china antigua observaba al cuerpo humano desde la óptica de su nivel de energía. Los antiguos médicos chinos han podido observar el mapa de canales de energía o “Jing-Lo”. (Foto: 4X-image/Getty Images)

No es solo el fundamento de este artículo el tratar la relación poder- importancia entre Hígado y Vesícula y Masculino y femenino, si no también los papeles protagonistas y secundarios más allá del género. Alguien poderoso y decidido, focalizará su meta y sin distracción, no desistirá hasta tener éxito.

Quien tenga una vesícula debilitada podrá tener una tendencia a cambiar de objetivos dejando sin finalizar a todos ellos. Podrá sufrir ataques de inseguridad en sí mismo y por lo que le rodea, así como ira y dificultad para perdonar.

Pero veamos un último matiz: el papel secundario hace lo que otros no quieren hacer y suple los lugares que siempre faltan por cubrir. Aquellos con estas características no destacan mucho aunque sus papeles no sean menores. Las vesículas en estos casos estarán estableciendo sus propias grandes virtudes.

Fuente lagranepoca

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